El coaching sistémico es una metodología que se enfoca en trabajar con el sistema completo de la persona, incluyendo su entorno y relaciones, en lugar de enfocarse solamente en el individuo. 

Los 5 beneficios del coaching sistémico son:

1. Identificación de patrones: El coaching sistémico ayuda a identificar patrones y dinámicas disfuncionales en las relaciones interpersonales y en el sistema en general. Esto puede ayudar a los clientes a entender mejor sus problemas y a encontrar soluciones más efectivas.
2. Enfoque en soluciones: El coaching sistémico se enfoca en soluciones en lugar de enfocarse en el problema. Los coaches trabajan con los clientes para identificar objetivos claros y alcanzables, y para desarrollar un plan de acción para lograrlos.
3. Mejora de las relaciones interpersonales: El coaching sistémico puede ayudar a mejorar las relaciones interpersonales y familiares. Al trabajar en el sistema completo, los clientes pueden aprender a comunicarse de manera más efectiva y a entender mejor las necesidades de los demás.
4. Aumento de la autoconciencia: El coaching sistémico puede ayudar a los clientes a aumentar su autoconciencia y a entender mejor su papel en el sistema. Esto puede ayudar a los clientes a hacer cambios positivos y duraderos en su vida.
5. Mejora en el desempeño: El coaching sistémico también puede mejorar el desempeño en el trabajo y en otras áreas de la vida. Al trabajar en el sistema completo, los clientes pueden aprender a aprovechar al máximo sus fortalezas y a superar sus debilidades.

En resumen, los beneficios del coaching sistémico puede ayudar a los clientes a mejorar su vida personal y profesional, a desarrollar relaciones más saludables y a lograr sus objetivos de manera efectiva.

Cr. Eduardo José Tartaglini Master Coach Certified International Coaching Federation